Archivos para abril, 2014

La Semana Santa es siempre una buena época para disfrutar de nuestro más enraizado folclore popular. Durante estos días he tenido la oportunidad de empaparme de música tradicional tanto en escenarios religiosos como paganos.

El Jueves Santo, mientras paseaba por  León, me crucé con varias procesiones que recorrían solemnes las céntricas e históricas calles. Las riadas de papones y pasos se acompasaban al ritmo de clarinetes, trompetas, trombones, saxos y el estruendo de los tambores. Una maravilla disfrutar de este impresionante espectáculo con el marco incomparable de la Pulchra leonina de fondo. Para escuchar algo de música procesional, os remito a mi post “Música sacra tú que sobrecoges”.

Procesión de Semana Santa en León. Al fondo La Casa Botines (Gaudí) y el edificio de la Diputación.

Procesión de Semana Santa en León. Al fondo La Casa Botines (Gaudí) y el edificio de la Diputación.

Después de la procesión religiosa, me volví a perder por las calles del Barrio Húmedo donde la tradición de estas fechas manda beber limonada, o como decimos en León, “matar judíos” y comer las ricas tapas que ponen en todos los bares.  Y así, limonada pa arriba, tapita pa abajo, llegué a la coqueta Plaza del Grano, punto de partida de una de las procesiones paganas más populares de España y que todos los años reúne a un sinfín de devotos, turistas y curiosos: “El entierro de Genarín”. La peculiar procesión se celebra en honor a Genaro, un pellejero borrachín, que fue atropellado a los pies de la muralla por el primer camión de la basura que hubo en León, allá por el año 1929. El singular evento comenzó a media noche cuando unos dulzaineros vestidos con boina y un tamboril anunciaron la salida de los curiosos pasos: en primer lugar salieron los cuatro evangelistas  (unos cabezudos que representan a los amigos de Genaro y que comenzaron esta tradición a la muerte del pellejero), luego un barril de orujo (bebida preferida del homenajeado), a continuación, “La Moncha” (la prostituta que le encontró), después, la muerte (que acecha a lo largo de todo el recorrido a Genaro) y finalmente, el paso más aclamado, el del pellejero agarrado a una farola con su inseparable botellina de orujo en mano.  La procesión recorre las calles del Barrio Húmedo hasta altas horas de la madrugada, y termina en el lugar donde Gerano fue arrollado por el camión.  Allí se le hace una ofrenda y se le recitan unos poemas:

“…Que pereció como un Santo,
Junto a un viejo murallón,
Genarín era llamado.
Y nacido fue en León…”

“…Bebamos en tu memoria una copina de orujo,
Que fue lo que más chupaste antes de ser difunto…”

La muerte acechando a Genaro. "Entierro de Genarín". León, 2014

La muerte acechando a Genaro. «Entierro de Genarín». León, 2014

El Domingo de Resurrección tocaba procesión de Pendones leoneses, este año un poco menos concurrida por la constante amenaza de lluvia. Los estandartes pasearon elegantes y ondeando al viento acompañados por el sonido de una gaita y de varios tamboriles entre las localidades omañesas de La Garandilla y Valdesamario.

Procesión de Pendones.  Romería de La Garandilla. Abril 2014, Omaña (León)

Procesión de Pendones. Romería de La Garandilla. Abril 2014, Omaña (León)

A continuación os dejo un vídeo de la procesión, muy curioso para los que nunca hayáis visto un desfile de pendones:

@brokenheroes

“Lourdes tiene agujetas”, “mañana es domingo”, “he ido al huerto”.  Sólo hacen falta tres frases como estas para que Julián Bozzo improvise una canción. Fue así, improvisando, como empezó el concierto del sábado en  el Café Libertad 8, uno de esos lugares que sigue manteniendo el encanto añejo de antigua taberna y que antaño fue punto de encuentro de periodistas, escritores y partidos antifranquistas. Hoy en día la acogedora sala sigue manteniendo una abundante agenda cultural de conciertos, recitales poéticos, cuentacuentos…

Este fue el agradable marco que Mundo Aladuría eligió para despedirse de sus incondicionales, entre los que me incluyo, [este era mi tercer concierto], ya que se retiran temporalmente a grabar nuevo material.  Como ya viene siendo habitual en sus conciertos, a todos los asistentes se nos regaló unas bonitas octavillas en las que en esta ocasión teníamos que escribir “cuál era nuestro ruido” y “lo que vendrá”. Durante la velada, una mano inocente sacaría al azar dichas octavillas para que el cantautor improvisase piezas musicales utilizando las frases que el público había anotado en las mismas. Esto es lo que hace único e irrepetible cada uno de los conciertos de Mundo Aladuría ya que consigue que los espectadores participen en la creación de nuevos temas musicales y lleguen a hacer un poco suyas las letras y las melodías que salen de la imponente voz y guitarra de Julián Bozzo.

Octavilla para la improvisación musical. Concierto Mundo Aladuría. 12 de abril, Libertad 8

Octavilla de improvisación. Concierto Mundo Aladuría. 12 de abril, Libertad 8

A lo largo del concierto, Mundo Aladuría fue repasando temas de su repertorio entre los que destacaron “Azul” (tema en el que todos participamos activamente coreando el pegadizo estribillo: contra la pena y la rabia el azul del mar…), “Yo también voy”, “Salir”, o la preciosa e intimista “Dormidita nada más”, inspirada en la mujer con la que se despierta todas las mañanas y que nos dejó a los allí presentes sin respiración.

Julián Bozzo. Mundo Aladuría.

Julián Bozzo. Mundo Aladuría.

También sonaron “Aladuría” [palabra inventada pero a la que Julián Bozzo ha atribuido el significado de capacidad de transformar en pretexto todo aquello que se muestra como obstáculo] y una canción que me gustó especialmente llamada “Indicaciones para un hombre confuso” que anima a dar una vuelta de tuerca a nuestra vida, a vencer los miedos, a soltar nuestra indecisión… a ¡SALTAR!

“…Ya sé que aunque encontré la llave
quien tiene que girar soy yo.

Salta no tengas miedo del cambio
de la gravedad de lo alto
de darle sitio a otra canción

Salta no tengas miedo del abismo
que los miedos son solo espejismos
que el primer paso es soltar la indecisión…”

(-Estribillo- Indicaciones para un hombre confuso. Mundo Aladuría)

Gracias Julián Bozzo por compartir otra noche mágica con todos nosotros y por permitirnos viajar contigo a ese fantástico Mundo Aladuría, donde por unos momentos podemos olvidarnos de “el ruido” de nuestras vidas.

Os dejo un ejemplo de cómo con el ruido “Tic Tac” y con la frase “Tocar las maracas en Maracaibo” se puede improvisar una divertida canción… [Aviso: os vais a desternillar de risa] 🙂

@brokenheroes

El pasado viernes asistimos a la fiesta de segundo aniversario de la irreverente Revista Mongolia que se organizaba en la mítica Sala Sol de Madrid. El maestro de ceremonias iba a ser Javier Coronas que, al fallar en el último momento, fue sustituido por el singular Antonio Castelo (reportero de El Intermedio). El showman empezó presentando la revista como el medio de comunicación que emplea a más abogados que periodistas

Primera portada de la Revista Mongolia.

Primera portada de la Revista Mongolia.

La primera parte del evento corrió de la mano de Castelo, que nos hizo partir de risa con sus ingeniosas bromas sobre los políticos corruptos. Posteriormente, Edu Galán y Darío Adanti (ambos de la revista), nos presentaron un pequeño vídeo sobre la misma titulado: “Mongolia, dos años haciendo amigos” 🙂

Inmediatamente después se daría paso al controvertido humorista Leo Bassi, que realizó uno de sus excéntricos shows en el que empezó vestido de Papa y acabó medio desnudo haciendo un número de faquir tumbándose encima de unos cristales. “Humor” provocador en su máxima expresión.

Acabado el show de Bassi, era el momento de las actuaciones musicales. El primer turno fue para Elías e Ignacio, un bizarro dueto que cultiva un género musical al que han denominado electrojotas. Para que os hagáis una idea, su concierto a veces era como escuchar a Fabio McNamara cantando “La Virgen del Pilar diceeeee…” La verdad es que me dejaron sin palabras. Os dejo uno de sus originales temas, ‘Toda la noche‘, para que juzguéis por vosotros mismos.

En segundo lugar se subió al escenario el veterano grupo Tiki Twangers que hizo un gran concierto instrumental de rock sureño mezclado con ritmos swing y country. Mientras que la banda actuaba, Mauro Entrialgo, el conocido ilustrador de publicaciones como El Jueves, El País, El Víbora, o la propia Mongolia, realizaba viñetas que se veían proyectadas en una pantalla de la sala. La mezcla de ambos estilos artísticos sobre el mismo escenario concedió al concierto un toque muy particular.

Finalizada esta actuación, el equipo de Mongolia dio las gracias a los asistentes a la fiesta, y nos animó a que continuásemos divirtiéndonos con la música de la DJ Linda Miranda, que pasaba a tomar los mandos de la cabina de la Sala Sol.

Fue una noche muy completa y divertida así que, desde aquí envío un aplauso muy fuerte a gente de Mongolia por el buen rato que nos hicieron pasar. He de reconocer que aunque no siempre comparto sus bromas (a veces son, para mi gusto, un poco bestias), creo que hacen falta más medios de comunicación como Mongolia, sin pelos en la lengua, y sobre todo, SIN MIEDO.

¡Feliz segundo aniversario… y que cumplas muchos más!

Con nuestro pasaporte a Mongolia...

¡Pasaporte a Mongolia!

Y si todavía no os queda claro qué es Mongolia…

@brokenheroes