En mi modesta opinión…
Otra de las citas musicalmente inenudibles que vivimos este verano fue el festival Sonisphere. Dos días repletos de heavy y rock internacional y alguna «referencia» made in Spain como Angelus Apatrida y Sober.
Este post no va ir dirigido a hacer una crítica musical del festival si no a hacer una crítica estructural y constructiva de puntos a mejorar, que por desgracia son muchos.
1. El cartel del festival: pues sinceramente, para ser un festival al abrigo de los grandes Sonispheres europeos, desde mi punto de vista el cartel era bastante flojo. Quitando a Maiden, Twisted Sisters y Dream Theater, el resto de los grupos no eran más que un «atrezzo» para rellenar el cartel. Todo esto sumado a la caída repentina, 15 días antes del festival, de una de las atracciones principales del cartel, Alice Cooper, que fue sustituido por Uriah Heep, que, no siendo santo de mi devoción, he de reconocer que hizo un papel muy correcto en el concierto.
2. El precio de las entradas: obviamente, el precio del festival me parece bastante abusivo en relación con el flojo cartel musical.
3. Recinto: en una palabra: INSALUBRE. Parece mentira que año tras año sigan organizando festivales en un recinto que no cumple ni de lejos las condiciones mínimas de salubridad. Este año además la organización de Sonisphere había anunciado a bombo y platillo las mejoras en el recinto, que como siempre, fueron insuficientes. El polvo que se levantaba cada vez que había un poco de aire, la ausencia de sombras para albergar todas las «metalheads» allí reunidas y el número reducido de lavabos hizo que nuestra estancia en el festival se pareciese a cualquier estancia en un «resort cinco estrellas súper lujo». Una verdadera vergüenza.
4. Servicios: a este punto podría dedicarle un post entero, pero intentaré resumir. No me voy a meter en el precio abusivo de las consumiciones en la barra porque es una batalla perdida, pero me parece demencial que ya que nos obligan a consumir porque no nos dejan meter nada de fuera, que se acabe en agua en las barras el segundo día (algo increíble!), que no haya bebidas light para personas con problemas de salud (léase diabéticos) y que la comida sea a base de grasa pura.
Otro punto a mejorar con creces es el de los transportes. A las 5 de la mañana se acababa el autobús que iba del festival a Madrid, funcionando sólo el que llevaba a Getefe. La lógica inversa se impone también en este punto!
Por lo tanto,
En mi modesta opinión… festival muy pero que muy mejorable (un aprobado raspadillo).
@brokenheroes