Archivos para diciembre, 2013

El día de Navidad me desperté con la triste noticia de que Germán Coppini, el hombre que no miraba a los ojos de la gente, había fallecido el día anterior después de una larga enfermedad. Su nombre a secas seguro que a muchos no os dice nada, pero si se le asocia con grupos como Siniestro Total o Golpes Bajos, la cosa cambia.

Fue allá por el año 81 cuando Germán Coppini se da a conocer como vocalista de Siniestro Total, uno de los grupos más representativo de la movida viguesa. Con esta banda de punk rock, Germán grabó el EP Ayudando a los enfermos (con clásicos como “Ayatollah”, “Matar jipis en las Cíes”, “Mario (encima del armario)» y “Purdey”) y el LP ¿Cuándo se come aquí?

Carátula LP Siniestro Total. ¿Cuándo se come aquí?

Carátula LP Siniestro Total. ¿Cuándo se come aquí?

Su etapa con Siniestro Total no duró mucho, ya que en el año 83 deja la formación para dedicarse de lleno al grupo que había creado junto a Teo Carralda (Cómplices) el año anterior y que se dio a llamar Golpes Bajos.  El estilo de este grupo era mucho más “popero” y más cercano a la esencia de la movida madrileña por lo que tuvo muy buena acogida.  De aquella época son himnos como “Malos tiempos para la lírica” o “No mires a los ojos de la gente”.

A pesar del éxito, sólo publicaron un LP y se disolvieron a finales de los 80.

Germán Coppini y Teo Carralda. Golpes Bajos

Germán Coppini y Teo Carralda.         Golpes Bajos

A partir de ahí Coppini inició su carrera en solitario sin pena ni gloria, aunque de vez en cuando realizaba colaboraciones con artistas como Nacho Cano, Alaska y los Pegamoides, Vainica Doble y, más recientemente, con el grupo sevillano Maga.

En mi modesta opinión, Germán Coppini ha sido uno de los grandes olvidados del pop-rock español a pesar de que nunca dejó de estar en activo. Quizá si nunca hubiese abandonado Siniestro Total, o si el proyecto de Golpes Bajos hubiese sido más productivo, este gran músico hubiese obtenido mucho más reconocimiento.

Desde aquí, a título póstumo, aprovecho para recordarle y dedicarle estas líneas.

Descansa En Paz Germán Coppini.

Os dejo dos vídeos:  uno de su época con Siniestro Total (“Me pica un huevo y otro de la de Golpes Bajo “No mires a los ojos de la gente”).

@brokenheroes

Pensaba que con Alter Bridge había cerrado mi agenda conciertil del 2013 hasta que recibí una grata llamada invitándome al concierto que Jorge Salán daría versionando temas clásicos del blues el jueves 19 de diciembre en la sala We Rock. La curiosidad me invadió… ¿blues de la mano de Jorge Salán? La mezcla resultante tenía que ser de todas todas buena.

Aunque antes del concierto tenía que hacer recaditos, esta vez sí llegué a las cañas (-sin -) previas. El evento contaba con dos grupos teloneros (Broken Lingerie y Bon Vivant ) y la actuación de Salán no se preveía que empezase antes de las 22.30.  Al llegar a la plaza de Santo Domingo me sorprendió la cantidad de motos ‘Harley Davidson’ que había aparcadas y es que resultó que la prestigiosa marca era una de las patrocinadoras del concierto.  Aparqué en un huequecín entre tanta “motaza” y me fui tranquila ya que había dejado my little princess bike rodeada de la mejor de las compañías.  ♥

Cuando entramos en We Rock, Bon Vivant, grupo al que no conocía pero en el que reconocí caras familiares (Charly, ex del grupo Barbaroja, y Borja, ex  de Niña Malvada) estaba finalizando su actuación. La sala presentaba un aforo aceptable, pero no lleno.  Una pena teniendo en cuenta que el concierto era gratuito, previa recogida de invitación.

De la mano del mítico Mariskal Romero y del periodista musical Mariano Muniesa, maestros de ceremonias esa noche, Jorge Salán salió a comerse el escenario entre los cálidos aplausos del público.  A lo largo del concierto pudimos disfrutar de versiones de blues de artistas como Stevie Ray Vaughan, Howlin Wolf, BB King, John Mayall o Gary Moore, transformadas al personal estilo rockero de Salán. El bajista lo denominó con un término que me encantó: – “Jorge, vamos a hacer un poco de blues sucio”.  🙂

Jorge Salán. Rock & Gasoline

Jorge Salán. Rock & Gasoline

El concierto fue muy animado y en primera fila se podía ver a auténticos rockabillys que parecían recién bajados del Delorian de “Regreso al Futuro” moviendo las caderas al más puro estilo Elvis. La única pega que puedo poner al evento es la del sonido ya el micrófono se acoplaba constantemente provocando un pitido que exasperaba a músicos y público.

Esta ha sido la segunda vez que he podido disfrutar de un concierto de Jorge Salán, y al igual que en la anterior ocasión, me ha impactado su capacidad hipnótica. Es un “mago de las seis cuerdas”.  Es capaz de mantenerte obnubilado durante todo un concierto mirando como sus dedos se desplazan veloces por los trastes.  Salán siente lo que toca, lo vive, y lo mejor de todo es que logra transmitírselo a su público en cada uno de los acordes que salen de su guitarra. Por eso no es de extrañar que artistas de la talla de Jeff Scott Soto, Robin Beck o Mago de Oz hayan contado con él para acompañarles en sus giras internacionales.

Rubias viendo a Jorge Salán.

Dos rubitas disfrutando del concierto de Jorge Salán.

A modo de broche final y como guiño a la abundante audiencia motera, Jorge Salán invitó a quien quisiera del público a subirse al escenario y corear con él el legendario “Born to be wild”. No se me ocurre mejor tema para acabar un concierto que fue de lo más original y divertido.

Resumiendo: en España hay guitarristas buenos, muy buenos y…  Jorge Salán, que es un virtuoso.

Os dejo una pequeña grabación que hice de la actuación. La calidad de la imagen y el sonido es deficiente, pero sirve para hacerse una idea de cómo fue el concierto.

@brokenheroes